MENTIR ES MAS QUE QUERER ENGAÑAR A
ALGUIEN
Todos somos mentirosos no intencionados
En la presente líneas recordamos
las informaciones que se encuentran disponibles en el libro ¨Credibilidad del Testimonio Infantil: El
intervalo de retención la repetición de entrevista y el CBCA¨. Un texto que
podría ser de interés del lector, puesto que describe la vulnerabilidad de las
declaraciones, dejando claro que los testimonios no solo son falsos cuando hay
una intención consciente de mentir, sino que también hay múltiples condiciones
psicológicas que pueden afectar lo que recordamos y como lo hacemos. En ocasiones
desarrollando falsas memorias y en otras desarrollando interpretaciones acordes
a las experiencias previas y no necesariamente apegado a la realidad de lo
ocurrido.
En la actualidad, muchos de los
conflictos están vinculados a la demostración de la verdad, esto debido la
necesidad de hacer valer el planteamiento que se defiende y con esto conseguir satisfacer
las necesidades y deseos, sean estos sociales o individuales. Con frecuencia,
sin tomar en cuenta la debilidad del ser humano para recordar con exactitud lo
vivido o experimentado.
Con frecuencia se piensa que se
tiene certeza en la totalidad de las cosas que se experimentan en la
cotidianidad, llegando a afirmar su veracidad como indiscutible e irrevocable,
siendo inflexible y negando todo tipo de dudas sobre el contenido de las
narraciones de los hechos. Con esto se comete un grave error.
Las declaraciones son solo una
reconstrucción de lo vivido o experimentado, siempre partiendo de la experiencia
previas, por lo que la forma en cómo se recuerdan las vivencias va a depender de
un conjunto de factores, tales como la situación emocional en que se encuentra
y en que se encontraba en el momento de los hechos, la capacidad de lenguaje,
nivel de inteligencia, metas que se persiguen en la vida, personalidad, contexto
en el que surgieron y en que se narran los hechos, entre otras tantas variables
que afectan las declaraciones de las personas en cualquier contexto en que sea
necesario recurrir a la memoria para explicar fenómenos o variables.
A todo lo anterior, se suma el
tipo de contenido que se se recuerda, resaltando que aquellos que responden a la
memoria emocional, son de difícil narración y explicación; al igual que aquellos
que responden a la memoria procedimental. No obstante, los asuntos semánticos y
episódicos tienen mayor facilidad para ser explicado y por ende menor
probabilidad de que la gente mienta de manera no intencional. Sin embargo, es válido
resaltar que las emociones están presentes, de una u otra forma, por lo que
siempre será importante tomar en cuenta la vulnerabilidad de lo que se dice, lo
que, sino no está referenciado con una evidencia constatable, será objeto de duda,
aun cuando no exista intención de mentir.